Aproximadamente el 75 % de las enfermedades infecciosas emergentes son de origen silvestre; la mayoría de ellas son causadas por virus, protozoarios y bacterias1. Entre las enfermedades emergentes en nuestro país, las rickettsiosis, causadas por garrapatas de la especie Rhipicephalus sanguineus s.l. (Figura 1), ha registrado la mayor incidencia de casos en los estados de Sonora, Chihuahua, Nuevo León, Baja California Norte, Coahuila y Durango, durante el periodo de 2009 a 2023; se han registrado 8988 casos, con la mayor incidencia en el año 2013 de 0.95 por 100 000 habitantes2. La enfermedad cobra adicional relevancia debido a la elevada letalidad que presenta cuando no se cuenta con diagnósticos estandarizados ni se ha tratado con oportunidad3.
Recientemente, en la región del Soconusco en el estado de Chiapas, se ha documentado la presencia de rickettsia en tres especies de garrapatas de ganado bovino: Rhipicephalus micro plus positiva a Rickettsiafelis, mientras que las especies Amblyomma cajennense y Rhipicephalus sanguineus fueron positivas a Rickettsia ricketsii4, lo cual demuestra una expansión de los nichos de transmisión a otras áreas como una consecuencia del cambio global que incluye el cambio climático.
Diferentes autores hacen referencia al impacto del cambio climático en las enfermedades infecciosas emergentes, principalmente las transmitidas por vector; un clima cambiante está asociado con una variación espaciotemporal en la exposición y en la transmisión de la infección en cada especie, se puede inferir que es probable que haya cambios profundos pero difíciles de identificar5.
El ciclo de transmisión de la rickettsiosis se caracteriza porque involucra un vector (garrapata) o huésped intermediario (mamíferos pequeños o humanos), estos dependen de ritmos circadianos para asegurar que las etapas de transmisión estén disponibles al mismo tiempo que el huésped está expuesto al huésped intermediario o vector.
Figura 1. ¿Qué son las rickettsiosis?
El cambio climático tiene el potencial de crear asincronía, ya sea modificando el comportamiento del hospedero (por ejemplo, el momento de buscar fuentes de alimento cambia como resultado de presiones abióticas -temperatura, humedad, precipitación- y bióticas -cobertura de vegetación- sobre el comportamiento del hospedero) o alterando la disponibilidad de hospederos en el momento necesario
para completar el ciclo de vida, esto ha dado como resultado un incremento en los ataques a población humana y, por lo tanto, una mayor densidad vectorial (Figura 2).
El cambio climático ha incrementado la movilidad poblacional en busca de mejores condiciones de vida, que en la mayoría de las ocasiones no son adecuadas debido a la falta de servicios públicos básicos, o de fuentes de ingreso para mantener la salud, lo cual genera índices de marginación propicios para la transmisión de la enfermedad. La región del Soconusco del estado de Chiapas se caracteriza por recibir una cantidad elevada de población migrante que proviene de diferentes países endémicos de rickettsiosis, principalmente Brasil, después Colombia, Argentina, Perú, Panamá y Costa Rica, lo que ha permitido inferir que esta enfermedad se haya instalado en esta región a través de cuatro procesos fundamentales: introducción, establecimiento, propagación e impacto.
La introducción se realiza cuando un hospedero, en este caso mamíferos pequeños, como perros y ratones, o mamíferos mayores, como el humano, que enfrenta a una nueva especie de patógeno cocobacilo polimorfo Rickettssia rickettsii, contra la cual no cuenta con anticuerpos o mecanismos de respuesta. El establecimiento se realiza cuando el nuevo hospedero se infecta desarrollando los síntomas, la enfermedad, como fiebre, cefalea y malestar general, que puede o no estar acompañada por exantema, o en algunas ocasiones puede presentar cuadros asintomáticos, lo cual incrementa el riesgo de transmisión.
Figura 2. Ciclo de vida de la rickettsiosis
La propagación se lleva a cabo cuando el hospedero puede infectar a individuos de la misma población a una velocidad rápida, que se denominó tasa básica de reproducción. El impacto se presenta cuando la transmisión de la enfermedad en la nueva especie provoca brotes de intensidad moderada o alta.
Desafíos para la salud pública
La OPS reconoce que el cambio climático plantea riesgos significativos a la salud y el bienestar y requiere de esfuerzos concertados de las autoridades de salud y otras instituciones gubernamentales para crear sistemas de salud resilientes. En nuestro país, la Secretaría de Salud ha impulsado diferentes iniciativas a través de las cuales se busca reducir los riesgos de la instalación de enfermedades emergentes, como la rickettsiosis. Sin embargo, las alteraciones ambientales de los sistemas ecológicos documentados a través de diversos estudios hacen evidente que la invasión de nichos y una pérdida de diversidad de poblaciones locales aumentó la interacción del cocobacilo polimorfo Rickettssia rickettsi con reservorios silvestres, incrementan do la aparición y transmisión de enfermedades en la población, mismos que podrían afectar el resultado de las intervenciones6.
Es necesario realizar un análisis de los ecosistemas en función de las variables bióticas y abióticas que deben ser consideradas para no alterar los nichos ecológicos donde se desarrollan estas enfermedades de origen silvestre.